DADA NO SIGNIFICA NADA
Si a uno le parece fútil y si uno no pierde el tiempo con una

palabra que no significa nada... El primer pensamiento que
revolotea en esas cabezas es de índole bacteriológica:
hallar su origen etimológico, histórico o psicológico, por lo
menos. Por los diarios se entera uno que a la cola de una vaca
santa los negros Krou la llaman: DADA. El cubo y la madre en
cierto lugar de Italia: DADA. Un caballo de madera, la nodriza,
doble afirmación en ruso y en rumano: DADA. Hay sabios
periodistas que ven en esto un arte para los críos, y otros santos
jesúsllamandoalosniñitos del día, el retorno a un primitivismo
seco y ruidoso, ruidoso y monótono. La sensibilidad no se
construye sobre una palabra; toda construcción converge en la
perfección que aburre, idea estancada de una dorada ciénaga,
relativo producto humano. La obra de arte no debe de ser la
belleza en sí misma, o está muerta; ni alegre ni triste, ni clara ni
oscura, regocijar o maltratar a las individualidades sirviéndoles
pasteles de las aureolas santas o los sudores de una carrera
arqueada a través de las atmósferas. Una obra de arte jamás es
bella, por decreto, objetivamente, para todos.(...)
Fragmento de siete 7 manifiestos DADÁ, que Tristán Tzara escribió en 1818
Otro fragmento que me parece maravilloso....
VII
A priori, es decir con los ojos cerrados, Dadá sitúa antes de la
acción y por encima de todo: a La Duda. DADA duda de todo.
Dadá es tatú. Todo es Dadá. Desconfíen de Dadá.
El anti-dadaísmo es una enfermedad: la selfcleptomanía, el
estado normal del hombre es
DADA.
Pero los verdaderos dadás están contra
DADA.
(...) (Sigue mucho)
No hay comentarios:
Publicar un comentario